Cuando hablamos de la experiencia SOIL, nos referimos no solamente a la oportunidad de producir aquellos productos imprescindibles de consumo diario, sino a la forma particularmente sustentable que tenemos de hacerlo. Nuestro propósito es fabricar bioproductos a escala industrial que estén formados por materiales de origen orgánico y renovable.
Los productos de SOIL están compuestos 100% de biopolímeros Mater-Bi®. Estos biopolímeros utilizan componentes de origen natural como el aceite de girasol, almidón de maíz y extractos del cardo. Se producen en la fábrica de Novamont SpA en Terni, Italia, y vienen en forma de gránulos que pueden ser procesados por las tecnologías de tratamiento más comunes. Permiten crear bioproductos de carácter similar a los plásticos tradicionales de un solo uso, pero totalmente biodegradables y compostables.
Esta familia de bioplásticos está certificada bajo los estándares más rigurosos a nivel mundial, por los laboratorios más prestigiosos, como TÜV AUSTRIA, que certifica bajo la norma EN-13432:2000 para garantizar la capacidad de los materiales de ser compostados y convertirse, en un futuro cercano, en un excelente fertilizante hecho de sustancias orgánicas mediante un proceso de compostaje.
Cuando hablamos de la materialidad de los productos SOIL, nos sostenemos en los procesos innovadores y tecnológicos que utilizamos para generar bioproductos con materiales de calidad, reutilizables y duraderos, que no dañan la naturaleza y brindan opciones a la hora de decidir qué queremos consumir y cómo producirlo para no generar impacto negativo en el planeta.